DEFENSA DE EPICURO CONTRA LA COMUN OPINION 2ª ED

DEFENSA DE EPICURO CONTRA LA COMUN OPINION 2ª ED

-5%
13,94 €
13,24 €
IVA incluido
NO DISPONIBLE
Editorial:
TECNOS
Año de edición:
Materia
Ensayo
ISBN:
978-84-309-4641-9
Páginas:
152
Encuadernación:
RUSTICA
Colección:
VARIAS
-5%
13,94 €
13,24 €
IVA incluido
NO DISPONIBLE

Desde los primeros años de su fecunda actividad, don Francisco de Quevedo dio sobradas pruebas de su amor por la cultura clásica. Numerosas traducciones de autores griegos y latinos jalonan, como prueba de ese interés, toda su ingente producción literaria. Lo mismo podría decirse de sus ensayos estoicos y de la Defensa de Epicuro, aparecida en Madrid en 1635. Con esta apasionante apología Quevedo intentó hacer del filósofo griego, impulsor del materialismo atomista y hedonista, un filósofo cristiano. Continuaba así la huella de los primeros humanistas italianos y, sobre todo, de Erasmo, quien, con el propósito de rehabilitar a Epicuro, había establecido un parangón similar. Quevedo debe ser considerado en este sentido como un exponente más del vasto movimiento paneuropeo que, a lo largo de varios siglos, intentó acomodar las escuelas filosóficas de la antigüedad al pensamiento cristiano.

Desde los primeros años de su fecunda actividad, don Francisco de Quevedo dio sobradas pruebas de su amor por la cultura clásica. Numerosas traducciones de autores griegos y latinos jalonan, como prueba de ese interés, toda su ingente producción literaria. Lo mismo podría decirse de sus ensayos estoicos y de la Defensa de Epicuro, aparecida en Madrid en 1635. Con esta apasionante apología Quevedo intentó hacer del filósofo griego, impulsor del materialismo atomista y hedonista, un filósofo cristiano. Continuaba así la huella de los primeros humanistas italianos y, sobre todo, de Erasmo, quien, con el propósito de rehabilitar a Epicuro, había establecido un parangón similar. Quevedo debe ser considerado en este sentido como un exponente más del vasto movimiento paneuropeo que, a lo largo de varios siglos, intentó acomodar las escuelas filosóficas de la antigüedad al pensamiento cristiano.

Otros libros del autor