Juan Gregory, médico del rey Jorge III de Gran Bretaña y profesor de medicina de la universidad de Edimburgo, imprime por primera vez en español en 1803 su Discurso sobre los deberes, qualidades y conocimientos del medico, nunca hasta ahora reeditado, en el que expresa sentencias tan certeras como ésta: "La verdadera dignidad de la Medicina no puede consistir ni recaer sobre la persona de los que la profesan, sino en tanto que estos la sostengan con la superioridad de sus talentos, con la extension de sus conocimientos, con sus buenas costumbres y franqueza, y que inflamados de aquel espiritu de candor que aborrece toda especie de simulación y artificio, acrediten en sus pensamientos la noble libertad que los anima". El presente facsímil incluye diversos discursos en los que el autor expone sus opiniones sobre temas tan variados como el decoro, la decencia y la compostura del médico, la utilidad y dignidad de la medicina, las diferentes ramas de ésta y de las ciencias que tienen conexión con la práctica médica, los abusos que se llevan a cabo en la medicina o el modo de instruir a los pretendientes a médico.
