«No somos dueños del amor: amamos lo que podemos, pues la muerte y el amor no se escogen. Presentimos que los raudales de la soledad volverán a correr aún más copiosos, pero intentamos destronar la muerte con el beso.»
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información