"Aquí se sueña. POr eso es posible imaginarlo todo. Especialmente ahora que este país es un país libre desde hace siete años. Ahora, trescientos años después de la colonización, doscientos cincuenta años de Santa Inquisición y once de lucha por la independencia. Ahora, aquí, el mundo es un lugar nuevo en el que hay que hacerlo todo. Por eso se inventa" El nombre de Don Joaquín de la Cantolla y Rico, ciudadano mexicano, libre y ejemplar, apenas será recordado por las futuras generaciones gracias a unos globos de papel que parecen chinos. Pero Cantolla, telegrafista y aeronauta, tuvo la singular e injustamente olvidada pretensión de crear un segundo piso en la capital mexicana hecho con globos aerostáticos. Lolita Bosch ha escrito su leyenda, que simbólicamente condensa más de un siglo de historia mexicana en un libro exquisitamente ilustrado por Elisenda Estrems. www.editorialmond
El protagonista de esta mágica historia es el mexicano Joaquín de la Cantolla y Rico, un soñador a quien pocos recuerdan, dedicado a los globos aerostáticos. Con talante visionario, propuso a las máximas autoridades de su país un sistema revolucionario para paliar la falta de espacio en la ciudad de México: levantar un «segundo piso» en el cielo con terrazas sostenidas por globos.
