Los personajes y las acciones que pinta Ulises Martín están llenos de vida, de acción, de realismo. En ellos adivinamos los miedos, las pasiones desmedidas, la traición, la ambición o el ansia de poder. Y, como dice el autor metafóricamente, el ser humano muestra al desnudo sus debilidades: ½Es media noche y sobre la tapia del convento pasea sigilosa la gata de fray Diego. Ante sus ojos dorados tiembla de miedo el ratoncillo de campo, serpentea fugaz el perenquén solitario y monta guardia la coruja noctámbula+. Ernesto Rodríguez Abad