La escritura de Holtby se desarrolla sin sentimentalismo, en beneficio de la complejidad y matices de sus personajes y el análisis de pasiones contenidas pero muy poderosas. Sus cuentos están repletos de comprensión y conocimiento de la psicología femenina y sus trampas. Una variedad de estilos los recorren sirviéndose de puntos de vista narrativos a menudo sorprendentes. Holtby, escenifica el final de una etapa y el comienzo de una nueva era en la posición de las mujeres ante la sociedad como sujetos activos. Frente a mujeres obsesionadas con preservar y transmitir el legado de una época pasada, Holtby opone un grupo de mujeres reivindicativas, libres, con voz propia y más poderosa.
Diez relatos que mezclan el tono satírico con la compasión, el asombro o la complacencia de diferentes tipos de mujeres. Madres malas y buenas, frívolas o malévolas, dulces o taimadas, son los personajes de Winifred Holtby para componer un mosaico de caracteres femeninos.
