Una hermosa mañana, el incorregible lobo se levanta de muy buen humor. Después de un delicioso desayuno, se pone su mejor traje. "¡Guau! ¡Estoy arrebatador! ¡Voy a dar una vuelta para que todo el mundo pueda admirarme!"
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información