El acoso sexual en un taller donde la mano de obra femenina vive los últimos abusos de una época de encargados déspotas y gerentes
	confundidos por los cambios que se les venían encima; es sólo uno de los temas que la novela saca a relucir. Empresarios y empleados,
	abogados, economistas, consultores, gerentes y ejecutivos tienen ante sí una novela que les va a sacar de sus casillas y que incluso puede
	serles útil como terapia basada en reponer pasajes y escenarios que muchos quisieron olvidar por el tormento que en su día les supuso. De
	la mano del protagonista, se recuerdan unos años que dejaron maltrechos a pequeños y medianos empresarios. Una novela de poca ficción,
	que forma parte de nuestra historia reciente, no menos dolorosa por no ser reconocida. El lector no sabrá como liberarse del clima
	envolvente y patéticamente arrollador, entrará en el mismo círculo vicioso del narrador y los protagonistas, tomará partido y cargará con
	complicidades que no le dejarán en paz hasta que acabe el libro y escape del zarpazo que le mantendrá atento durante toda la lectura. Al
	final la compasión se impone, pero ésta no vendrá del libro, sino de su lector.